La vida es como el aletear de una mariposa generando movimientos que producirán sus efectos en el cosmos. Si agarráramos una mariposa por las alas, sería un evento desastroso, pues ellas se romperían fácilmente. Si atrapáramos una mariposa para contemplarla, lo más posible es que la veamos morir. Tentamos mariposas todo el tiempo. Tentamos a la vida. A su vez muchas personas interactúan con nosotros como si fuéramos de metal superresistente, como si nada pudiera dañarnos pero somos como mariposas, efímeras, libres, diurnas, nocturnas, diferentes y extremadamente frágiles.
Maria Raquel Bonifacino
…Que vulnerables y que fuertes que somos, para sobrevivir en esta sociedad que desde que nos levantamos en la mañana y hasta la noche…sufrimos una manipulacipon permanente…de los medios y hasta de los afectos que nos rodean…
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Gracias Carlos por tus opiniones, gracias por estar, feliz día!!!
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